Realicé estos maquillajes con un toque de fantasía con la aplicación de máscaras para darle un aire misterioso y conseguir textura y equilibrio tanto en las formas como en el color. Caras blancas acordes con los miriñaques como si de muñecas de porcelana se tratara para darle fragilidad a la imagen y labios en rojo vivo que aportan ese punto sexy y teatral.
En esta
sesión buscaba potenciar la mirada sofisticándola a través de sombras
metalizadas en tonos dorados, esmeralda y anaranjados rasgando los ojos con un
eyeliner intenso para lograr una mirada más felina y con fuerza, para una mujer
que irradia feminidad.
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